Si bien esta jornada estuvo prácticamente vacía de catalizadores, los principales índices bursátiles operaron a la baja, por un lado por un movimiento natural después de una racha positiva de casi dos semanas, pero por otro, asimilando las posibles consecuencias del deterioro en la política fiscal en EE. UU. tras el recorte a la perspectiva de la calificación crediticia y el agotamiento de fondos del gobierno federal a más tardar el 17 de noviembre, cuyas negociaciones podrían entorpecerse por el nuevo liderazgo en la Cámara Baja. Por otro lado, también se está a la espera de la publicación de cifras macroeconómicas en EE. UU. a lo largo de la semana, especialmente la inflación y los datos de la demanda interna. También destacan más comentarios de algunos miembros de la Fed, así como la reunión entre los Presidentes de EE. UU. y China que está programada para el miércoles con lo que se espera que se limen algunas asperezas en las relaciones sinoamericanas.
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